La Biblia

Guías didácticas:

  1. Puede optar por completar este tema en una sesión.
  1. El objetivo de esta clase es ayudar a los buscadores de la verdad a comprender que la Biblia es inspirada por Dios y a tener el deseo de estudiar y de aprender de ella.

Diapositivas de presentación:

▶️ Diapositivas sobre la Biblia para usar en clase
 

La Biblia es única

La Biblia es un libro extraordinario. Estas son algunas de las formas en que la Biblia se destaca de entre otros libros:

Circulación

Primero, la Biblia es única en la medida de su circulación. Pocos libros han alcanzado un millón de copias vendidas. Menos aún hay libro alguno que haya vendido más de 10 millones de copias. ¡Pero la Biblia se ha vendido en la cantidad de billones! ¡Eso es asombroso! Hoy en día, se estima que el número total de Biblias impresas es de 6 billones. Según el Libro Guinness de los Récords Mundiales, “El libro más vendido y distribuido en el mundo es la Biblia…”
La Biblia ha sido traducida a la mayor cantidad de idiomas que cualquier libro en la historia del mundo. La mayoría de los libros publicados nunca se traducen a otros idiomas, y los pocos que lo hacen sólo se traducen a una docena de idiomas. Según las Sociedades Bíblicas Unidas, la Biblia está disponible en más de 2.550 idiomas. Esto representa más del 90% de la población mundial.

Influencia

La Biblia ha influido mucho en la civilización, incluyendo la literatura, el arte y la música. Los siglos se miden desde el nacimiento de Jesús, que es el personaje central de la Biblia. Las leyes del mundo occidental se basan en los principios de la Biblia.
La Biblia ha inspirado la vida de muchas personas prominentes a lo largo de la historia, como el filósofo Immanuel Kant y el presidente Abraham Lincoln. Charles Dickens llamó al Nuevo Testamento “el mejor libro que alguna vez fue o será conocido en el mundo”.
Entonces, ¿qué hay en esta colección de escrituras antiguas que llamamos la Biblia que trae un impacto tan profundo en el mundo?

Unidad

La Biblia es un libro escrito a lo largo de 1.500 años por 40 autores. Estos autores fueron de todos los ámbitos de vida, incluyendo pescadores, médicos, pastores, reyes, y recaudadores de impuestos. Pero a pesar de la diversidad de los autores y los diferentes períodos y lugares en los que ellos vivieron, los 66 libros de la Biblia tienen un mensaje consistente y coherente.
Imagínate si le pidieras a 40 de tus amigos que escribieran sus pensamientos sobre algunos de los temas tratados en la Biblia. Para dar algunos ejemplos de los temas de la Biblia, aborda temas como el matrimonio, el divorcio, el adulterio, el cuidado de los pobres, el materialismo, el cielo, el infierno, la paciencia, la injusticia, la riqueza, el disfrute de la vida, la paternidad, la amistad, los milagros, la familia, y el perdón.
Lo que obtendrías sería una compilación de varias opiniones y posiciones, sin un mensaje unificado. Y eso es sólo lo de tus amigos. Ahora, imagina pedirle a las personas que vivieron con cientos de años de diferencia que escriban un libro sobre esos temas.
La asombrosa unidad de la Biblia nos dice que, si bien fue escrita por seres humanos como nosotros, no es simplemente un libro humano. Dios lo dispuso para que ciertas personas escribieran lo que Él quería que se dijera en ese momento, así como lo que Él intentaba transmitir a las personas de las futuras generaciones. Y se aseguró de que sus escrituras fueran preservadas y recopiladas en lo que ahora tenemos como nuestra Biblia.

La afirmación de la Biblia

Los autores de la Biblia afirman que lo que escribieron fue recibido directamente de Dios mismo.
Un autor escribe en 2 Pedro 1:20-21:
entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada, porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.
¿Qué significa eso? Los autores de la Biblia fueron personas ordinarias que hablaron y escribieron basándose en sus propias experiencias. Escribieron sobre lo que sucedía a su alrededor en ese momento: eventos históricos y cuestiones políticas y sociales. Expresaron sus propias personalidades y hablaron de sus alegrías y problemas personales. Esto hace que la Biblia sea un libro completamente humano. Pero a través de la variedad humana llega la voz del Dios vivo que habla al pueblo de esa época y a nosotros ahora.
Como solo un ejemplo, la razón por la cual el autor Jeremías escribió vino directamente de Dios y no era de sí mismo:
Palabra de Jehová que vino a Jeremías, diciendo: "Así habló Jehová Dios de Israel, diciendo: Escríbete en un libro todas las palabras que te he hablado". (Jeremías 30:1-2)
Jeremías luego continúa relatando lo que se le ordenó escribir:
Estas, pues, son las palabras que habló Jehová acerca de Israel y de Judá. Porque así ha dicho Jehová:" (Jeremías 30:4-5a)
Según Jeremías, lo que él había escrito en la Biblia eran en realidad palabras del Señor.
Como puedes ver, el propósito de la Biblia es diferente al de otras literaturas. Si bien la Biblia registra la historia, es más que solo historia. La Biblia registra las palabras que provienen de Dios mismo.
Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, (2 Timoteo 3:16)
Este autor afirma que toda la Biblia es inspirada por Dios. Como palabras inspiradas por Dios, la Biblia es el estándar de la doctrina y nos dice lo que es justo y lo que no es. La Biblia, más que la razón humana, la iglesia o el pastor, debe ser la guía y la autoridad para las creencias y el estilo de vida de un cristiano.
La Biblia cubre preguntas importantes acerca de la vida, el mundo y el destino de la humanidad. Responde preguntas fundamentales que todos los seres humanos enfrentan: ¿de dónde venimos? ¿cómo encontrar el significado en una vida que un día terminará? y ¿cómo recibir la salvación eterna? Estudiando la Biblia nos revela las verdades sobre Dios, sobre nosotros mismos, y sobre cómo debemos de vivir.
Ya sea que hayas leído la Biblia o no, es importante que investigues y decidas por ti mismo lo que vas a hacer de lo que dice la Biblia.

¿Cómo sabemos que la Biblia es inspirada por Dios?

Ahora que sabemos que la Biblia afirma ser inspirada por Dios, ¿cómo podemos saber que estas afirmaciones son ciertas? Todos queremos una dirección en nuestras vidas y en los pasos que tomamos. En un mundo confuso, es maravilloso tener la Biblia como guía. Pero, ¿podemos confiar en la Biblia y en sus enseñanzas? ¿Es la Biblia simplemente ficción, mito o ideas de personas religiosas?
Si las declaraciones de este libro, la Biblia, son de hecho inspiradas por Dios y dignas de nuestra confianza, entonces deben ser precisas, confiables y verdaderas. Veamos algunas áreas en las que la Biblia pasa esta prueba.

Arqueología

Los hallazgos arqueológicos modernos han confirmado la exactitud de las personas, de los lugares y de los eventos históricos registrados en la Biblia. Por ejemplo, se pensaba que los hititas mencionados en la Biblia no existían, pero con descubrimientos arqueológicos posteriores, hay evidencia de este grupo de personas.
De hecho, la mayoría de las ciudades antiguas mencionadas en el libro de los Hechos han sido identificadas mediante hallazgos arqueológicos. Eso incluye 32 países, 44 ciudades y 9 islas que se ha demostrado que existen y que corroboran que las narrativas de la Biblia se basan en hechos.

Ciencia

Mientras que la ciencia no puede comprobar que la Biblia es inspirada por Dios, si la Biblia es verdaderamente la palabra de Dios, entonces las declaraciones de un Dios todopoderoso podrían resistir lo que sabemos hasta ahora a través de la ciencia. La Biblia no solo es exacta en su descripción del universo, sino que hizo estas declaraciones mucho antes de que los seres humanos supieran que estos principios eran verdaderos.
Por ejemplo, la Biblia dice en Job, que es uno de los libros más antiguos de la Biblia, capítulo 26, versículo 7, que la tierra está suspendida sobre la nada. No fue probado hasta 1687, cuando Isaac Newton descubrió la ley universal de la gravitación, que la Tierra flota en el espacio.
En Isaías 40:22, Dios declara que extiende los cielos como una cortina y los despliega como una tienda para morar. Estas palabras fueron escritas cientos de años antes de Cristo. En el siglo XX, el astrónomo Edwin Hubble descubrió que vivimos en un universo en expansión y que el espacio en realidad se extiende como lo describe la Biblia.
La Biblia también declara en Job 38:16 que hay manantiales en el océano. Las primeras aguas termales de aguas profundas se descubrieron en 1977 en la grieta de Galápagos, al oeste de Ecuador. Desde entonces, se han encontrado en los océanos Índico, Pacífico y Atlántico Norte. Otros pasajes de la Biblia se refieren a las corrientes oceánicas y al ciclo del agua antes de que fueran cartografiados y reconocidos por los científicos (p.ej. Salmo 8:8; Job 36:27-28).

Profecías

¿Cómo sabría la gente que Dios estaba inspirando a un autor humano a escribir? Sería algo difícil de detectar. ¿Cómo se puede saber que el autor no sólo estaba escribiendo de manera sincera o profunda sino que de hecho tenía un mensaje especial de Dios? Una forma es a través de las predicciones milagrosas que están fuera del ámbito de la capacidad humana. Dado que los seres humanos son incapaces de ver el futuro, la capacidad de afirmar con precisión lo que sucederá es en sí un milagro.
Otros libros que afirman ser divinos, tales como el Corán, el Libro de Mormón y el Veda hindú, contienen pocas profecías predictivas detalladas. Sin embargo, la Biblia registra numerosas profecías del futuro, muchas de ellas con gran detalle, y cientos de las profecías de la Biblia se han cumplido.
Por ejemplo, Jesús predijo que Jerusalén sería destruida y que no quedaría ninguna piedra sobre piedra. Cuarenta años después, Jerusalén fue sitiada y quemada en febrero del 70 d.C. por el general romano Tito y 80.000 de sus soldados. En septiembre de ese año, también los muros fueron derribados y el templo fue arrasado.
Profetas como Daniel, Jeremías y Ezequiel también predijeron el destino de otros países como Edom, Babilonia, Media-Persia, Egipto y Grecia. Los resultados de los países se cumplieron en la historia como lo describe la Biblia.

Experiencia personal

Además de las diversas evidencias externas mencionadas anteriormente, la prueba más directa de que la Biblia es verdadera y aplicable a nosotros es cuando experimentamos personalmente que la palabra de Dios está haciéndose realidad en nuestras propias vidas.
Hoy, Dios nos sigue hablando a través de las palabras registradas de los profetas, los apóstoles, y de su Hijo Jesucristo. Dios quiere comunicarse con la gente. No quiere ser un Dios distante e incognoscible. Es a través de la Biblia que Dios toma la iniciativa para mostrarnos quién es Él. En la Biblia, Dios provee lo que necesitamos saber para tener una relación íntima con Él. Sólo necesitamos seguir el camino que Él ha puesto delante de nosotros y podremos tener la experiencia de que Dios está vivo y se preocupa por ser parte de nuestras vidas.
La Biblia está llena de las promesas de Dios que son para que las recibamos nosotros y beneficien nuestras vidas. En nuestros matrimonios y en la forma en que criamos a nuestros hijos, los principios de la Biblia nos ayudan a encontrar una vida de amor, satisfacción, paz, alegría y propósito. Si tomas en serio las palabras de la Biblia y las aplicas en tiempos de soledad, frustración o tristeza, podrás encontrar consuelo y fortaleza. En tiempos de confusión y duda, la palabra de Dios puede iluminar tu camino y guiarte.
  • Comparte tu experiencia personal o tus testimonios
Si reclamas las promesas para ti mismo, podrás experimentar personalmente que en verdad es el Dios todopoderoso y amoroso quien nos habla a través de la Biblia.

Beneficios de la Biblia

A diferencia de los libros seculares, que brindan entretenimiento y conocimiento para nuestra vida diaria, la Biblia nos instruye sobre cómo obtener la salvación.
En 2 Timoteo 3:15, aprendemos que las Sagradas Escrituras pueden hacer a una persona sabia para la salvación.
Dado que hemos sido separados de Dios y debido a nuestros pecados, necesitamos la palabra de Dios para que nos guíe de regreso. La palabra de Dios no sólo nos muestra el camino a la vida eterna, sino que también puede transformarnos a medida que la aplicamos a nuestras vidas. Aquí hay algunas maneras en que la Biblia transforma nuestras vidas:

La palabra de Dios es alimento

Él respondió y dijo: “Escrito está: “‘No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios’”. (Mateo 4:4)
El pan proporciona la energía que necesitamos para sobrevivir. Pero no sólo necesitamos alimentos físicos para sustentar nuestras vidas. El hambre de nuestra alma no puede satisfacerse con cosas materiales. Muchas personas buscan gratificación en la riqueza, el alcohol, las drogas, el sexo, el amor o la posición social alta, y sólo encuentran más vacío y dolor.
Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación. (1 Pedro 2:2)
La Biblia es la fuente de alimento espiritual y emocional que necesitamos, así como un niño necesita leche para crecer. La Biblia es vida y salud para nosotros. Mientras nos alimentamos de la palabra de Dios, nos volvemos espiritualmente saludables, y eso nos edifica para ser espiritualmente fuertes y maduros.

La palabra de Dios es una lámpara

Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino. (Salmo 119:105)
Sin luz podemos tropezarnos e incluso lastimarnos mientras caminamos en la oscuridad.
Sin la iluminación de la palabra de Dios en nuestras vidas, podemos pasar nuestros días vagando sin rumbo fijo. La Biblia es una luz que nos muestra dónde estamos, nos guía al siguiente paso y evita que caigamos. A través de la Biblia podemos encontrar soluciones a nuestros problemas, sin importar cuán grandes o pequeños sean. Podemos experimentar su guía en nuestra vida diaria y sentirnos confiados y seguros en cada paso del camino.

La palabra de Dios es un espejo

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, este es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. (Santiago 1:23-24)
El punto aquí es que no deberíamos simplemente saber lo que está bien y lo que está mal. Deberíamos corregir nuestro error después de descubrir dónde nos hemos equivocado. Una cosa que podemos aprender de las palabras de Santiago es que la Biblia es como un espejo que nos muestra quiénes somos realmente.
A veces el peligro o el problema no está en nuestro entorno sino en nosotros mismos. La Biblia sirve como un espejo que revela nuestra verdadera condición. Nos convence de nuestros defectos para que sepamos cuándo nuestros pensamientos y nuestras elecciones son incorrectas. Cuando vemos suciedad en nuestra cara en el espejo, limpiaremos la mancha. De la misma manera, cuando la Biblia pone de manifiesto nuestros defectos, podemos entonces tomar las medidas necesarias para realizar cambios.

Comenzando con la Biblia

La Biblia es una recopilación, no un libro de ficción que deba leerse de principio a fin. Así que no es necesario que empieces por la primera página. Sobre todo porque el primer encuentro con la Biblia puede ser desalentador, puedes elegir libros por donde empezar.
Hay una mezcla de diferentes géneros y estilos literarios dentro de la Biblia. Esto incluye narrativas históricas, leyes y regulaciones, poesía y proverbios, parábolas, cartas y visiones y mensajes proféticos.
Una sugerencia para las personas nuevas a la Biblia es la de comenzar con los evangelios, las historias de Jesús, quien vino a darnos un nuevo comienzo. Si te gusta leer poesía reflexiva que muestra la gama completa de las emociones humanas, puedes leer el libro de los Salmos. Si te interesa la historia, puedes leer los libros de historia para conocer el origen de la nación judía, sus luchas por la supervivencia en Canaán, su ascenso al poder, su cautiverio y su regreso del exilio.
Hay algunos consejos para abordar la lectura de la Biblia que pueden ayudarte a aprovechar al máximo tus estudios.

Un poco cada día

Cuando comiences a estudiar la Biblia, el mejor enfoque es que leas o escuches un pasaje cada día. No podrás terminar de leer toda la Biblia en unas pocas sesiones, por lo que es mejor reservar un poco de tiempo cada día para dedicarlo sistemáticamente a la lectura bíblica.
Aprender la palabra de Dios es como una aventura o una búsqueda de tesoro. Tómate el tiempo para disfrutarlo. Incluso aquellos que han leído la Biblia muchas veces continúan adquiriendo nuevas ideas y recibiendo consuelo de pasajes familiares. Hay riquezas y recompensas para toda la vida en la palabra de Dios, y te están esperando para que las descubras.

Deja que te hable

Acércate a la Biblia con un corazón receptivo y una mente abierta para aprender y recibir las enseñanzas de la Biblia. No te apresures a formular tu propia opinión e interpretación.
La Biblia nos enseña en Santiago 1:21:
Recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas.
Cuando las palabras de Dios son plantadas en nosotros, pueden crecer hasta convertirse en vida espiritual.
Al ver cómo Dios habló y actuó en el pasado a través de la Biblia, tenemos una idea de cómo es este Dios inmutable y el tipo de vida que Él quiere que vivamos. La Biblia está llena de versículos positivos y reconfortantes, pero también contiene palabras de reproche y advertencia que no debemos dejar pasar. Mientras lees, ponte en la mente y en las emociones del autor, y piensa en lo que el pasaje hubiera significado para aquellos que lo escucharon por primera vez y lo que nos está diciendo ahora.

Pide y busca

Haz preguntas sobre lo que estás leyendo y deja que te desafíe al mismo tiempo. Cuando te encuentres con preguntas, pide a Dios entendimiento. Ora por el Espíritu Santo, que puede guiarnos a toda la verdad, porque Jesús prometió a sus seguidores en Juan capítulo 16 versículo 13: "Cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad".
Puede que te resulte útil tener un cuaderno para anotar tus pensamientos mientras lees un pasaje. Esto te ayudará a retener lo que has leído. Encontrar a otras personas para discutir tus preguntas y reflexiones también te ayudará en gran medida a digerir y a aplicar lo que lees en tu vida.
Las tendencias y las filosofías de este mundo surgen y desaparecen. Las generaciones vienen y van. La Biblia y sus enseñanzas son eternas, transforman más vidas que cualquier otro libro en la historia.

Preguntas y respuestas frecuentes

  1. ¿Cómo sabemos que la Biblia es inspirada por Dios? [4.1]
  1. ¿Está la Biblia pasada de moda? [4.3]
  1. ¿Ha sido la Biblia modificada con el tiempo? [4.5]
  1. ¿Por qué la Biblia no parece tener sentido? [4.11]
Respuestas (Preguntas y respuestas, Capítulo 4: La Santa Biblia)